miércoles, 11 de mayo de 2011

La diferencia entre capacitar y entrenar

A pesar que sin pensarlo mucho utilizamos estos términos determinando “lo mismo” existe una interesante diferencia. La verdad, “capacitar” no es lo mismo que “entrenar”, especialmente desde el punto de vista de las preparaciones organizacionales.


Haciendo una analogía con los deportes, por ejemplo en el fútbol, los grandes jugadores han iniciado sus carreras en las “escuelitas” donde aprendieron las reglas básicas, los movimientos básicos y las técnicas. Podemos describir el proceso de la capacitación como la preparación con respecto a las aptitudes necesarias para los diversos puestos dentro de la compañía, sea cual sea el rubro o giro de negocio.

Cada colaborador debe ser “capaz” de realizar sus tareas de manera profesional.A pesar de las destrezas demostradas por las grandes figuras del fútbol, estos mantienen una rutina de entrenamiento “diario” para llegar en plenas condiciones a los compromisos. De la misma manera los colaboradores en las compañías deben “practicar” periódicamente de manera a “mantenerse en forma”. 


Estos entrenamientos van de la mano con la inyección de actitud al equipo.Así diferenciamos las actividades que llevamos a cabo, desde la inducción de los colaboradores hasta los entrenamientos requeridos en las diferentes capacidades necesarias. La cuestión es: ¿están entrenados nuestros colaboradores?